lunes, 4 de abril de 2011

(SECTOR CRITICO .- PORQUÉ NO VOTAMOS EL ACUERDO DE PENSIONES



Las compañeras y compañeros que conformamos el sector crítico de CCOO hemos Las compañeras y compañeros que conformamos el sector crítico de CCOO hemos votado en contra

PORQUÉ NO VOTAMOS EL ACUERDO DE PENSIONES
1. La modificación de la pensión de jubilación no es asunto de "urgente necesidad" desde el momento que, incluso con los cálculos que hacen los interesados catastrofistas de siempre, se reconoce que nuestro Sistema tal y como está hoy configurado no tendría problemas hasta el 2030 y goza de un superávit, aún en tiempo de crisis como el actual, de 64.000 millones de Euros. Por ello, consideramos que la reforma (que habría que desarrollar para mejorar el Sistema Público de Pensiones y nunca para empeorarlo sobre la base de recortes) podría realizarse en un futuro no marcado por el lastre de la crisis y la presión de los especuladores.
 
2. Tenemos un gasto en pensiones 3 puntos inferior a la media de la UE y lo seguiremos teniendo al menos hasta el 2030, momento en el que aún estaremos un punto por debajo.
 
3. La crisis económica que sufrimos no tiene nada que ver con las pensiones ni su futuro, sino con un sistema financiero descontrolado y depredador unido a la especulación inmobiliaria. En lugar de controlar estos excesos, esta reforma provocará un trasvase de ahorro hacia los fondos de pensiones privados, alimentando la misma lógica que ha causado la crisis y poniendo en severo riesgo ese mismo ahorro de los trabajadores.
 
4. El que se haga la reforma con esta premura es, en palabras de la Ministra de Economía y del Presidente de Gobierno, para dar
a los especuladores financieros (los mercados), pero ello no quiere decir que estos dejen de especular. La cuestión es clara, se está actuando en beneficio, no de la ciudadanía, sino de los poderes financieros. 

5. Las proyecciones en las que se basan los que quieren rebajar el gasto para el sostenimiento del sistema no tienen en cuenta ni el crecimiento del PIB futuro ni de la productividad. Con un crecimiento modesto de la productividad habrá muchos más recursos que los actuales para las pensiones.
 
6. La financiación de las pensiones, en caso hipotético de que pudiera tener déficit en el futuro, no tiene porqué ser siempre financiada con cuotas sobre los salarios, también puede hacerse con tributos progresivos sobre los beneficios o de los PGE.

El Acuerdo Gobierno-Sindicatos contiene medidas que consideramos inasumibles, en especial las siguientes:
Aumento de la edad legal de jubilación y exigencia de más años cotizados

• Se aumentan tres años y medio los años obligatorios de cotización para tener derecho a la jubilación ordinaria a los 65 años, con el 100% de la base reguladora (pasando de 35 a 38,5 años).

• Se necesitarán 37 años cotizados para jubilarse a los 67 años con el 100% de la base reguladora, lo que supone dos años más de cotización y aumento de dos años de la edad de jubilación.

• Desaparece la jubilación especial a los 64 años.
El aumentar la edad mínima obligatoria de jubilación para la práctica totalidad de las personas trabajadoras a los 67 años es un recorte de derechos muy importante, con las consecuencias

ASPECTOS CONCRETOS DEL ACUERDO


sociales de tener que estar trabajando hasta una edad inasumible físicamente muchas veces, por lo que es fácil prever un aumento importante de las situaciones de incapacidad temporal entre los futuros trabajadores de más de 65 años, con el agravante de que el empresario puede despedir cuando quiera con las facilidades que da la reforma laboral, aplicándosele a la persona despedida los coeficientes reductores (un 7,5% cada año que se jubile antes de la edad ordinaria, 67 años en la mayoría de los casos). A todo ello se añade la dificultad que tienen estos colectivos de seguir trabajando, como lo demuestra que la tasa de ocupación de las personas de 60 a 64 años es del 32,1% frente al 66,5% de los de 50 a 54 años.
El retraso de la edad de jubilación supone además cerrar la puerta dos años más a los millones de jóvenes que están en paro y a los que se les niega la posibilidad de trabajar.
El aumentar el periodo de cotización a 38,5 años es poner un listón inalcanzable para una mayoría de trabajadores y trabajadoras, con carreras de cotización inestables, que verán disminuida notablemente su pensión, y que además consigue por sí misma el aumento de la edad de jubilación.

Se aumentan los años a computar para el periodo de cálculo de la pensión.

Se pasa de los 15 años actuales a 25 en un periodo de diez años, medida que supone otro recorte para la práctica totalidad de los trabajadoras y trabajadoras, que verán mermar sus ingresos seriamente sobre la situación actual.


FEBRERO 2011


CONCLUSIONES

Toda la filosofía y el objetivo del Acuerdo inciden en el gasto, pero no existen medidas claras y computables sobre los ingresos, haciendo fuerza en la   sostenibilidad" del sistema en lugar de en la Se acepta una falsa idea de equidad –dar prestaciones según lo aportado- que prepara el terreno ideológico para los sistemas de capitalización.


Los jóvenes y mujeres que se incorporan al mercado de trabajo en situaciones precarias, con bajas cotizaciones, empleo discontinuo o tiempo parcial, van a ser los mayores perdedores con esta reforma, condenándoles a pensiones de miseria.

El retraso de la edad de jubilación de 65 a 67 años y el aumento del cálculo hasta 25 años, supone, para la mayoría de los futuros jubilados y jubiladas, una reducción de su pensión (como reconocemos en trabajos y estudios del propio Sindicato). Para el gobierno y los sectores económicos más poderosos, el objetivo del acuerdo es producir un fuerte recorte en los derechos sociales y en las expectativas de pensión actuales y futuras de millones de personas trabajadoras, para favorecer el negocio de los planes y fondos privados de pensiones.


La reforma va a generar en el medio y largo plazo una importante segmentación en la sociedad española, en la que las pensiones garantizadas por el sistema de Seguridad Social, a las que accede la población trabajadora en general, se aproximarán cada vez más a las no contributivas o asistenciales, lo que puede incentivar la no declaración de todas las rentas percibidas. Muy pocas personas podrán acceder a los niveles máximos de pensión del sistema y por ello, se está a que, quien tenga niveles altos de renta y capacidad de ahorro, busque sistemas alternativos, evidentemente, sistemas de capitalización en el mercado financiero. Una lógica absolutamente perversa.


Por último, hacemos un llamamiento a militar en CCOO, defendiendo sus opiniones, la democracia y la pluralidad, de esta organización, que sigue siendo el sindicato donde cientos de miles de trabajadores y trabajadoras cada día luchan por un mundo mejor.
FEBRERO 2011

Documento de trabajo. Estudio de impacto económico del anteproyecto de Reforma del Sistema Público de Pensiones

Documento de trabajo 
Secretaría de Economía y Trabajo de IU Federal

Nos limitamos en este trabajo a reflejar el impacto económico del anteproyecto de Reforma del Sistema Público de Pensiones, tal como se refleja en el texto aprobado por el Gobierno y que puede ser modificado en el proceso de consulta al Consejo Económico y Social, en su formulación como Proyecto de Ley y en el trámite parlamentario correspondiente.

La argumentación política ya ha sido dada por los órganos de dirección de IU federal.
No obstante, como en los argumentos ofrecidos por el Gobierno, y por los voceros académicos y mediáticos de que dispone, se están utilizando datos demográficos, económicos, sociales y del sistema público de pensiones con una interpretación, en nuestra opinión poco sería, situamos estos datos en un contexto con un mayor rigor y seriedad.

Madrid, marzo de 2011.
RESUMEN EJECUTIVO
1.- Se ha estudiado el anteproyecto de Ley desde un doble punto de vista: el recorte del gasto en pensiones sobre el PIB que representa la reforma (aspecto macroeconómico) y la disminución media de cada pensión, utilizando varios modelos que puedan recoger diversas situaciones.

2.- Desde el punto de vista macroeconómico, el aumento de la edad legal de jubilación representará en 2045 unos 2,4 puntos del PIB (17,7% del 14% del PIB estimado por el Gobierno como gasto en pensiones sin la reforma, es decir 2,47 puntos de PIB) (El Gobierno ha estimado este concepto en 2 puntos de PIB en el documento citado en la introducción. Esta cifra puede aceptarse porque un porcentaje de trabajadores, si llegan a los 38,5 años de cotización, podrá seguir jubilándose a los 65 años. Este porcentaje es difícil de calcular puesto que depende significativamente de la evolución del mercado de trabajo. Puede aceptarse que se sitúe en torno al 20%).

3.-  El incremento de 15 a 25 años para el cálculo de la base reguladora representa, de acuerdo con el Gobierno, 0,2 puntos de PIB por año. En total, 2 puntos cando esté en plena aplicación.

4.- El aumento de la edad necesaria para cobrar el 100% de la base reguladora implica otro recorte que se puede estimar en 0,8 puntos de PIB.

5.- En total, el recorte del gasto que desde el punto de vista macroeconómico representa la reforma equivale a 4,8 puntos de PIB. En 2045 este porcentaje puede representar unos 100.000 millones de euros.

6.- Como carácter general todos los pensionistas, excepto los que puedan acogerse a la jubilación anticipada, perderán la percepción de la pensión durante dos años de su vida. Esto representa una pérdida del 17,7% del total de las cantidades a percibir como pensión, una vez jubilados. Esta pérdida será progresiva, a partir del 0,7% para quienes se jubilen en 2013.

7.- Por el contrario, al aumentar en una media de 2 años el perío
do de cotizaciones, se producirá una mayor contribución por cotizaciones, del orden del 5,7% del total de las cotizaciones pagadas a lo largo de la vida laboral de un trabajador. Desde 2013, cuando habrá que cotizar tres meses más, se producirá un aumento progresivo que, inicialmente representa un 0,15% de cotización total.

8.- La OCDE ha publicado en marzo de 2011 un estudio sobre el impacto de la reforma en el sistema de pensiones con una metodología diferente, considerando la disminución de la tasa de reemplazo del importe de la pensión con relación al último salario cobrado con una doble hipótesis: a) trabajadores sin lagunas de cotización cuya tasa de reemplazo disminuiría en un 9% y b) trabajadores con una laguna de cotización de 10 años, cuya tasa descendería en 13,2%. El estudio de la OCDE no tiene en cuenta los dos años menos de percepción de la pensión.
Documento de trabajo 
Secretaría de Economía y Trabajo de IU Federal
Nos limitamos en este trabajo a reflejar el impacto económico del anteproyecto de Reforma del Sistema Público de Pensiones, tal como se refleja en el texto aprobado por el Gobierno y que puede ser modificado en el proceso de consulta al Consejo Económico y Social, en su formulación como Proyecto de Ley y en el trámite parlamentario correspondiente.
La argumentación política ya ha sido dada por los órganos de dirección de IU federal.
No obstante, como en los argumentos ofrecidos por el Gobierno, y por los voceros académicos y mediáticos de que dispone, se están utilizando datos demográficos, económicos, sociales y del sistema público de pensiones con una interpretación, en nuestra opinión poco sería, situamos estos datos en un contexto con un mayor rigor y seriedad.
Madrid, marzo de 2011.
RESUMEN EJECUTIVO
1.- Se ha estudiado el anteproyecto de Ley desde un doble punto de vista: el recorte del gasto en pensiones sobre el PIB que representa la reforma (aspecto macroeconómico) y la disminución media de cada pensión, utilizando varios modelos que puedan recoger diversas situaciones.
2.- Desde el punto de vista macroeconómico, el aumento de la edad legal de jubilación representará en 2045 unos 2,4 puntos del PIB (17,7% del 14% del PIB estimado por el Gobierno como gasto en pensiones sin la reforma, es decir 2,47 puntos de PIB) (El Gobierno ha estimado este concepto en 2 puntos de PIB en el documento citado en la introducción. Esta cifra puede aceptarse porque un porcentaje de trabajadores, si llegan a los 38,5 años de cotización, podrá seguir jubilándose a los 65 años. Este porcentaje es difícil de calcular puesto que depende significativamente de la evolución del mercado de trabajo. Puede aceptarse que se sitúe en torno al 20%).
3.-  El incremento de 15 a 25 años para el cálculo de la base reguladora representa, de acuerdo con el Gobierno, 0,2 puntos de PIB por año. En total, 2 puntos cando esté en plena aplicación.
4.- El aumento de la edad necesaria para cobrar el 100% de la base reguladora implica otro recorte que se puede estimar en 0,8 puntos de PIB.
5.- En total, el recorte del gasto que desde el punto de vista macroeconómico representa la reforma equivale a 4,8 puntos de PIB. En 2045 este porcentaje puede representar unos 100.000 millones de euros.
6.- Como carácter general todos los pensionistas, excepto los que puedan acogerse a la jubilación anticipada, perderán la percepción de la pensión durante dos años de su vida. Esto representa una pérdida del 17,7% del total de las cantidades a percibir como pensión, una vez jubilados. Esta pérdida será progresiva, a partir del 0,7% para quienes se jubilen en 2013.
7.- Por el contrario, al aumentar en una media de 2 años el período de cotizaciones, se producirá una mayor contribución por cotizaciones, del orden del 5,7% del total de las cotizaciones pagadas a lo largo de la vida laboral de un trabajador. Desde 2013, cuando habrá que cotizar tres meses más, se producirá un aumento progresivo que, inicialmente representa un 0,15% de cotización total.
8.- La OCDE ha publicado en marzo de 2011 un estudio sobre el impacto de la reforma en el sistema de pensiones con una metodología diferente, considerando la disminución de la tasa de reemplazo del importe de la pensión con relación al último salario cobrado con una doble hipótesis: a) trabajadores sin lagunas de cotización cuya tasa de reemplazo disminuiría en un 9% y b) trabajadores con una laguna de cotización de 10 años, cuya tasa descendería en 13,2%. El estudio de la OCDE no tiene en cuenta los dos años menos de percepción de la pensión.http://www.facebook.com/album.php?id=100002068790510&aid=15563#!/photo.php?fbid=106931589385800&set=a.106921129386846.15563.100002068790510&theater

La reforma de las pensiones premia los salarios altos y las carreras largas

IU cuantifica en un estudio el impacto económico del nuevo modelo a través de nueve simulaciones // Quiere demostrar que el cambio es injusto e innecesario
JUANMA ROMERO Madrid 01/04/2011

Desde el principio, Izquierda Unida rechazó la reforma de las pensiones suscrita entre el Gobierno, la patronal y los sindicatos el pasado 2 de febrero en el palacio de la Moncloa. La juzgó injusta, la tachó de pensionazo, la asimiló a la doctrina expresada por el ya expresidente de la CEOE Gerardo Díaz Ferrán: “Trabajar más y cobrar menos”. Pero no había dado cifras concretas de por qué el nuevo modelo –aún en tramitación parlamentaria e implantado por completo en 2027– perjudicaba a los trabajadores.
Ahora las tiene. Y dos son sus conclusiones claves. Una, que se verán claramente beneficiados los que cuenten con cotizaciones altas, carreras laborales largas (por encima de 37 años) y que se hayan quedado en paro en los últimos cinco años de su trayectoria profesional. Y dos, que el recorte medio de la pensión será del 10%, un punto más que la merma que calculaba la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en su informe del pasado 17 de marzo.

El estudio de IU, obra de su secretario de Economía, José Antonio García Rubio, y al que ha tenido acceso Público, plasma en sus 30 páginas el impacto de la reforma una vez que esté “prácticamente universalizada”, en 2045. Proyecta cuánto gana o pierde el trabajador en función de nueve modelos de vida laboral, que combinan distintos parámetros: cotización estable o variable, cuantía de la misma, con o sin situación de desempleo en los cinco años últimos antes de la jubilación...
IU emplea una metodología distinta a la de la OCDE. Y única, porque ni el Ejecutivo ni los agentes sociales han cuantificado hasta ahora la incidencia de la reforma, que sube de 15 a 25 años el periodo de cómputo y permite cobrar el 100% de la pensión con 65 años y 38,5 cotizados o bien con 67 años y 37 de contribución a la Seguridad Social.
Casuística infinita
Así, en la simulación más simple, con una carrera estable –sin grandes subidas o bajadas de salario–, y sin que se hayan producido situaciones de paro o lagunas de cotización, la pensión podría disminuir, respecto al sistema actual, hasta un 7,2%. En otro modelo, con una cotización variable, correspondiente a un salario medio-bajo y cinco años de paro al final, el mordisco oscila entre un 0,3% y un 5,5%. Para trayectorias por encima de 37 años, el trabajador percibirá un 0,6% más si se compara con la ley vigente.
En otros dos paradigmas, los que dispongan de una cotización estable o variable, hayan disfrutado de un sueldo alto (tres veces o más el salario mínimo) y se queden sin trabajo al final de su larga vida laboral, la prestación podría aumentar más de un 14%.
A estas cifras hay que añadir el perjuicio que supone que, con carácter general, los españoles deban trabajar dos años más, lo que implica, según IU, “una pérdida del 17,7% del total” de la cantidad percibida. Es así porque la edad media de los pensionistas es de 75 años, “diez menos que la esperanza de vida de la población”.
Para el Estado, la reforma supondrá un ahorro del gasto en pensiones del 4,8% del PIB (la OCDE estimaba un recorte del 3,5%). Es decir, un tajo de 100.000 millones de euros en 2045. Hoy, España consume en pensiones un 9% de su renta.
“Debíamos dar consistencia numérica a los argumentos políticos –relata García Rubio–, demostrar que la reforma no era necesaria y que perjudica a los que tengan sueldos medios-bajos [entre 1,5 y 2,5 veces el salario mínimo] y coticen menos años”. El dirigente de IU subraya la “dificultad” de diseñar simulaciones, porque la casuística es infinita. “Cada carrera laboral es un mundo. Pero al menos la gente podrá hacerse una idea de cómo le afecta la reforma”.

LA DEMOGRAFÍA QUE NO COMPARTE IU 
Los pensionistas no son todos los mayores de 65 años
Además de las simulaciones, IU intenta desmontar uno de los argumentos más utilizados por el Gobierno: la necesidad de abordar la reforma de las pensiones por el envejecimiento de la población. La formación de Cayo Lara, en la primera parte de su documento, expone que de los 7.931.164 habitantes con 65 años o más, sólo 4.821.542 cobran prestaciones contributivas. De forma que los pensionistas mayores de 65 años son, "a lo sumo", el 60,8% de la población mayor de 65 años. IU también dice que no es "correcto" identificar la esperanza de vida de la población (en torno a 85 años) con la vida media de los pensionistas (75 años).

La federación se basa en las estadísticas de la Seguridad Social.
Si se acepta que cada diez años aumenta 12 meses la esperanza de vida a los 65 años, IU deduce que en 2030, los pensionistas vivirán unos 77 años. "Es decir, la duración media de la pensión seguirá siendo de 11 años y pocos meses, con lo que el aumento de la esperanza de vida será amortizado a costa de los pensionistas", afirma el texto.
Penalización menor si hay paro 
¿Por qué IU ha incluido en sus modelos la eventualidad de que una persona se quede en paro en los últimos cinco años de su vida laboral? Reconoce, como los sindicatos, que efectivamente en ese periodo hay más riesgo de quedarse sin trabajo. Por eso se centra en esos casos. Y también porque Gobierno y centrales insistieron en que ahora la penalización para esos colectivos sería menor que con el sistema vigente. IU admite que se han mejorado las cosas, aunque no lo suficiente.
¿Por qué la ventaja? La reforma permite sustituir dos años de laguna de cotización por dos años de cotizaciones reales. Como explica García Rubio, hoy día esos vacíos se cuentan como la cotización mínima para mayores de 18 años. A partir de ahora, como se podrá elegir el canje con dos años en los que la cotización sea mayor, la pensión sufre un empujón.